Atención
a Pacientes
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Exámenes en la Mujer
La mujer debe realizar una serie de pruebas para determinar si existe infertilidad.
Exámenes hormonales
Primera fase del ciclo, el 3er día desde que te viene la regla estudiamos las siguientes hormonas: FSH, LH y estradiol, TSH, testosterona, prolactina, hormona antimülleriana.
Comprobamos si hay alteraciones en estas hormonas, que intervienen en el desarrollo folicular, y así poder diagnosticar el funcionamiento normal del ovario. También nos sirve para prever el comportamiento frente al tratamiento y dependiendo de los resultados, a veces se hace necesario ampliar el estudio hormonal.
Factor Tubárico y Uterino
Útero y trompas son necesarios para que el proceso reproductivo finalice en un embarazo. Las trompas son el lugar donde el óvulo y espermatozoide se unen y su integridad es necesaria para que se produzca la fecundación y el posterior descenso del óvulo fecundado a la cavidad uterina para su implantación. Para valorar la normalidad de la anatomía femenina disponemos de varias pruebas diagnósticas.
Ecografía Vaginal
Es la prueba más sencilla y la primera en realizarse por la gran información que proporciona y por la inocuidad de la misma. Con ella se valora la normalidad del aparato reproductor femenino. Si existe alguna anomalía visible en la cavidad endometrial por ecografía, se puede complementar con otras pruebas como la histerosonografía o la histeroscopía.
Histerosonografía
Similar a la ecografía, consiste en la realización de una ecografía vaginal acompañada de la introducción de suero fisiológico estéril en la cavidad uterina con lo que se consigue la distensión de la misma y con ello la visualización de la existencia de pólipos, septos uterinos, miomas submucosos o adherencias intrauterinas en su interior que pueden interferir con la implantación de los embriones o producir abortos. Durante la realización de este examen también hacemos una prueba de transferencia con el mismo catéter que realizamos la colocación de los embriones, para verificar que no haya ninguna estrechez que dificulte la transferencia.
Histeroscopía
Consiste en la visualización directa de la cavidad uterina con una pequeña cámara que se introduce por el cuello uterino. La histeroscopía tiene la ventaja de poder resolver en ese preciso momento la patología que generó su indicación. Es decir, podemos realizar la extirpación de pequeños pólipos endometriales, miomas o septos uterinos que puedan interferir con la implantación del embrión en el endometrio.
Histerosalpingografía
Esta técnica consiste en una serie de radiografías del útero y las trompas tras la administración de un medio de contraste a través del cuello del útero. Principalmente se usa para verificar el estado de las trompas uterinas para ver si están obstruidas o inflamadas.
Laparoscopía
Consiste en la visualización directa del aparato reproductor femenino vía abdominal con un sistema óptico (endoscopio) que se introduce por el ombligo. Es una técnica quirúrgica que al igual que la histeroscopía nos permite, no sólo llegar a un diagnóstico sino a la realización del tratamiento quirúrgico adecuado en cada caso, como por ejemplo realizar la extirpación de quistes ováricos, fulguración de lesiones de endometriosis, extirpación de miomas o la liberación de adherencias que estén interfiriendo con la fertilidad.